Todo lo que debes saber sobre los Nanomateriales

Su definición científica va más allá del tamaño de sus dimensiones. Hay ciertos criterios que debe cumplir;

• Tiene cualidades únicas.

Primero que nada, los nanomateriales difieren de los materiales “normales” por esta característica; las partículas se comportan de manera diferente en una microescala. Es decir, al ser reducidos a este tamaño tienen propiedades imposibles de lograr en su escala regular.

Tras años de investigación se ha demostrado que estas propiedades se deben a tres características peculiares que todo nanomaterial posee; La dimensión diminuta de las partículas, la forma en que interactúan las estructuras unas con otras y la gran cantidad de fracciones que los pequeños átomos conforman.

• Manipula científicamente la estructura molecular.

Una vez que los microscopios permitieron observar la estructura nanométrica de estos materiales, fue posible replicarla en un laboratorio. Este proceso consiste en reducir un material de su tamaño natural o encontrar la combinación exacta de átomos que se asemeje a su nanoestructura. Luego, es posible alterar su orden para mejorar su capacidad creando así un material “a la medida”.

• Puede estar compuesta por distintos materiales.

Existen diferentes tipos de nanomateriales. Estos se clasifican según su composición. Veamos cuáles existen:

• Nanomateriales orgánicos: Son compuestos por nanomateriales derivados del carbón (un buen ejemplo son los nanotubos de carbón)
• Nanomateriales inorgánicos: Estos consisten en nanomateriales cuyas propiedades provienen de la oxidación causada por nanopartículas de
• Nanomateriales híbridos: Tal como lo dice su nombre, son materiales compuestos por una combinación de los dos tipos anteriores.

• Sus usos y aplicaciones son infinitos.

Como hemos mencionado, el descubrimiento de los nanomateriales cambió las reglas del juego. La ingeniería ya no tiene que adaptarse a los materiales disponibles, ahora podemos diseñar una superficie que se adapte de forma exacta a nuestras necesidades. Con eso en mente, hablemos un poco sobre las soluciones y beneficios que los nanomateriales nos ofrecen.

Hasta el momento, sabemos que los nanomateriales pueden aplicarse para optimizar casi todos los aspectos de nuestra vida; en el deporte (se utilizan para crear equipamiento más resistente; en la óptica, para dotar los vidrios de la protección que necesitan, en la medicina, probando nanopartículas de oro para tratar diferentes enfermedades, en la construcción, reforzando estructuras con nanomateriales a base de carbono. Como vemos, las posibilidades de aplicación parecen no tener fin.

Sin embargo, el campo más estudiado hasta el momento es el de la química. Las superficies son diseñadas para actuar como catalizadores, cuya labor es albergar reacciones químicas. Estas reacciones tienen como resultado la creación de nuevos compuestos que poseen cualidades realmente convenientes. Una de ellas es la autodesinfección. Los nanomateriales permiten que una superficie común y corriente pueda limpiarse de forma autosuficiente a través del proceso de la fotocatálisis. Más que eso, se ha encontrado que hay nanomateriales que se pueden utilizar para crear tejidos antisépticos, por sus propiedades germicidas y fungicidas.